En las últimas 48 horas la ciudad sumó más de 1.100 nuevos pacientes, y aumenta la presión sobre el sistema de salud.
Por La Capital
En las últimas 48 horas, Rosario superó los mil nuevos pacientes de coronavirus. Si bien hay indicadores que le permiten a la ciudad decir que la curva de contagios no es exponencial, lo que le da aire al sistema de salud, la proporción de las llamadas “camas Covid” ocupadas no para de incrementarse semana a semana. Y así lo refleja el informe detallado de la Secretaría de Salud Pública de la Municipalidad, que muestra que la ocupación de plazas en terapia intensiva se mantienen en un 75 por ciento en el sector público tras la medida de suspender cirugías programadas, las ocupación Covid ya superó el 20 por ciento, y en el sector privado ya esta en el 17 por ciento.
Insistiendo una y otra vez que el escenario no es el de no tener casos, sino el de lograr amesetar la curva para no saturar el sistema de salud y que eso le permita dar respuestas, la estabilización de algunos indicadores marcan justamente que si bien la curva es ascendente, no es exponencial.
La última barrera, la semana pasada, había sido de 472 casos, sin embargo, tras la caída en el número de contagios que se da todos los fines de semanas y que tiene que ver con la ralentización de los resultados de los testeos, esta semana la ciudad marcó dos nuevos récords: 532 nuevos contagios este miércoles y 575 este jueves. Así, en menos de 48 horas, sumó más de 1.100 pacientes positivos.
Si bien de esos pacientes la mayoría no requiere internación, se estima que un 20 por ciento aproximadamente necesita sala general y un 2 por ciento cuidados intensivos, ese incremento en el número de casos diarios va marcando el ritmo de de ocupación de las llamadas camas Covid.
En el informe de la última semana de agosto, la proporción de plazas ocupadas a causa de la pandemia no alcazaba el 10 por ciento, estaba en un 8 por ciento en el sector público y un 7,5 por ciento en el sector privado. Una semana más tarde, esas cifras habían crecido al 15 por ciento y al 11,5 por ciento respectivamente, y esta semana el sector público rompió otra barrera con un 21 por ciento, y los privados se ubicaron apenas detrás, con un 17 por ciento.
La suspensión de las cirugías e intervenciones programadas, en todo el sistema, permitió despejar plazas y mantener la ocupación general de camas críticas en un 75 por ciento en el sector público, y disminuirlo en el sector privado del 50 al 33 por ciento, donde aún hoy se mantiene; sin embargo, la pandemia hace cada vez más presión sobre el sistema.
El equilibrio que da aire
Sin hablar de datos alentadores, sí hay indicadores que se mantienen estables, lo que permite a las autoridades sanitarias hablar de un sistema que aún no está saturado y de una curva que no es exponencial.
Allí, uno de los datos fundamentales es el tiempo de duplicación de casos se extendió de 10 a 11 días, lo que desde Salud no leen como un buen indicador, pero sí como un dato que permite sostener un escenario de cierto equilibrio. Lo mismo sucede con el RT, que determina el número de casos secundarios por cada contagio, que de haber alcanzando el 1,5 _es decir que por cada dos positivos se contagiaran otras tres personas_, volvió a descender al 1,2.
Un número que la equipara al indicador provincial, está también en 1,2, aunque algo por encima del nacional, ubicado en 1,05.
En tanto, la tasa de letalidad pasó del 0,86 por ciento, al 0,93 por ciento, en una ciudad que ya acumula 7.822 casos totales, 2.352 activos y 73 muertos. La proporción de pacientes recuperados se mantiene por encima del 65 por ciento.
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