abril 27, 2024

Radio Gran Rosario

FM 88.9 MHZ.

En poco más de un mes, fueron desbaratadas 14 fiestas clandestinas

 

 

Se realizaron en el Gran Rosario y algunas contaban con más de 40 personas. Estos encuentros son focos de contagios.

 

Por La Capital

Las restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus generaron reacciones adversas que preocupan. Solo en septiembre último y los pocos días que lleva octubre, las autoridades desbarataron 14 fiestas clandestinas en el Gran Rosario y en las que imputaron a cerca de 100 personas. La cantidad de asistentes a los encuentros ilegales fue dispar: en algunos había “cuatro o cinco”, dijeron, pero en otros más de 40, como en la madrugada de ayer en Camilo Aldao al 500, en barrio Ludueña.

Esta fiesta terminó con 43 personas aprehendidas por el Comando Radioeléctrico, pero no fue la única de las últimas horas. Poco tiempo después, ya por la mañana, personal de la misma dependencia se presentó en un domicilio de pasaje Ancón al 3400, en la zona sudoeste, tras recibir una denuncia. Había doce personas a las que se les secuestró gran cantidad de bebidas: 13 botellas de champagne y 2 de vodka, además de latas de energizantes.

El fiscal Carlos Covani ordenó trasladar a organizadores e invitados a la seccional 32ª, donde se les abrió una causa por desobediencia a las medidas sanitarias para prevenir el coronavirus.

En el caso del barrio Ludueña, en tanto, se supo que entre las personas que quedaron demoradas figuran dos chicas menores de edad. Incluso, cuando los agentes del Comando llegaron al lugar, fueron agredidos por una mujer que sería la dueña de la propiedad.

El procedimiento correspondía por jurisdicción a la seccional 12ª, pero fue absorbido por la 14ª por encontrarse esa dependencia bajo protocolo de Covid 19. Según trascendió, las personas demoradas quedaron alojadas en la seccional 10ª por cuestiones edilicias.

Según destacó Alberto Mongia, subsecretario provincial de Prevención y Control Urbano, “se está trabajando con dos marcos generales, las denuncias que ingresan que por el lado del Sistema de Emergencias del 911 y el 0800-555-6768, proporcionado por el gobierno provincial y, por otro lado, el 147, que es de la Municipalidad”.

De este modo, si la denuncia ingresa por el 147, es el municipio el que concurre al lugar a los fines de corroborar si efectivamente hay alguna fiesta. Si la llamada ingresa por alguno de los otros dos canales, quienes se desplazan al lugar mencionado son los policías. “La idea es acudir de manera inmediata para corroborar que haya alguna fiesta”, remarcó el funcionario.

La Unidad Regional correspondiente a Rosario y la región dispuso una brigada policial especial abocada a este tipo de problemática. “El personal que participa va variando, incrementando su número los fines de semana en horario nocturno, que es cuando precisamente ingresa el mayor número de denuncias”, sumó Mongia.

De hecho, esta semana, en la sede de Rosario del Ministerio de Seguridad hubo una reunión junto al municipio, la jefatura de Policía de la Unidad Regional II y los fiscales Carlos Covani, Marcelo Vienna y Matías Ocariz de la Unidad Especializada Covid-19 para analizar los procedimientos pasados “y continuar perfeccionando los diferentes mecanismos de actuación ante estas fiestas clandestinas”, indicó luego.

Este tipo de fiestas se vienen desarrollando a pesar de la prohibición de los encuentros afectivos y desde hace meses, tal como dio cuenta La Capital.

Solo por citar un ejemplo, la Secretaría de Control y Convivencia del municipio, en conjunto con personal de la Policía de Acción Táctica (PAT) desarticuló el 16 de agosto en plena madrugada, en la zona noroeste de Rosario, una fiesta clandestina que desafiaba las normas impuestas como prevención ante la pandemia. Participaban de la reunión 45 personas y todas ellas fueron detenidas. El operativo se realizó en la cortada Cachi 964, en inmediaciones de José Ingenieros y Colombres, en el barrio Fisherton.

Según indicó la Municipalidad, “dada la caraterización de las restricciones del último decreto provincial (que prohíbe la circulación vehicular de 20 a 6, salvo situaciones excepcionales), se decidió llevar adelante mesas operativas con una caracterización especial”. Así lo subrayó el secretario de Gobierno, Gustavo Zignago, uno de los integrantes y organizadores del último encuentro de las autoridades ligadas al control.

La reunión se realizó para “articular acciones conjuntas y sincronizar canales de comunicación”, añadió en función de que los encuentros hoy solo están autorizados en los bares (con fuertes medidas de distanciamiento) y hasta la medianoche y, de ninguna manera en domicilios particulares, mucho menos si son masivos.

Además, el cónclave tuvo lugar como parte de los habituales análisis tripartitos que se realizan desde que en julio pasado debutó el equipo que reúne a la policía, la Municipalidad y la Fiscalía Regional y que funciona como una especie de “brigada antifiestas” que desbarata encuentros clandestinos.

Tendencia creciente

“Según las denuncias y lo que hemos observado, parecería que hay una tendencia creciente de estos encuentros clandestinos”, subrayó ayer el secretario de Gobierno de la Municipalidad, Gustavo Zignago.

El funcionario dijo que este tema se “puso en escena esta semana en una reunión para monitorear las acciones llevada a cabo entre la provincia y el Ministerio Público de la Acusación (MPA)”. La idea giró en torno a “seguir sincronizando canales de comunicación”. El municipio accede a las imágenes del centro de monitoreo, que permiten ver la circulación vehicular, y las denuncias a la línea 147.